Desde el 2003, en la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española, las doctoras Amparo Morales, María Vaquero y Marilyn Montalvo trabajan en una importante obra: un Diccionario de anglicismos. El proyecto se presentó formalmente el pasado marzo en Colombia, durante el XIII Congreso de Academias de la Lengua Española. Las autoras esperan concluir el trabajo en el 2008.
Este diccionario llenará una laguna en la lexicografía puertorriqueña: no contamos todavía con ningún diccionario que recoja de manera exhaustiva los anglicismos de uso en Puerto Rico. Se representará además los diferentes tipos de anglicismos del discurso actual puertorriqueño, que, según la nomenclatura establecida para el diccionario, incluyen: anglicismos crudos, anglicismos adaptados, anglicismos híbridos, neologismos anglicados, desvíos semánticos y calcos de estructura. Otra innovación del diccionario es que recogerá no sólo palabras simples, sino también frases de apariencia hispánica, que imitan o calcan combinaciones del inglés.
Veamos algunos ejemplos, siguiendo la nomenclatura propuesta, que resulta muy útil para clasificar y analizar –e incluso identificar– los anglicismos con que nos topamos todos los días. En primer lugar, están los anglicismos crudos, o sea, los que mantienen su forma original escrita en inglés: “air bag”, “file”, “refill”, “gate”, “foam”. En este grupo se incluyen muchas voces que nombran avances tecnológicos o novedades culturales, para los que no existe equivalencia inmediata en español, aunque como vemos en los ejemplos, no todos tienen esas características.
Luego tenemos los anglicismos adaptados, como: “printear”, “dropearse”, “píchear”, “cáchear”. Se trata de palabras con raíz inglesa y terminación hispánica, o bien alguna otra combinación de las morfologías inglesa y española en una misma palabra.
En tercer lugar, están los anglicismos híbridos, que usualmente son palabras compuestas o frases que combinan un elemento inglés y otro español: “guagua van”, “cables de yompear”, “esquema de corrupción/fraude” (donde “esquema” es un calco semántico de “scheme”).
Cuarto, figuran los neologismos anglicados. Estos usualmente proceden de una palabra en inglés, y tienen en español una derivación que no ha ocurrido en inglés. Por ejemplo, “janguear” viene del verbo inglés “to hang (out)”. En español, “janguear” ha dado el derivado “jangueo”, que no tiene equivalente en inglés. Otro ejemplo: “bad trip” en inglés significa ‘experiencia desagradable al usar una droga’. Aquí el significado de “badtrip” se ha extendido a cualquier experiencia negativa, y ha generado derivados como “badtripear” (verbo: “Eso me badtripea”) y “badtripeado” (adjetivo: “Estoy bien badtripea’o”).
Siguen los desvíos semánticos, que generalmente ocurren con los cognados: palabras con forma similar en español e inglés, que no comparten el mismo significado. Ejemplos de ello son “abortar” por “abort” (‘cancelar un plan prematuramente’), “tarjeta” por “target” (‘persona objetivo de una misión’) y “agresivo” en el sentido positivo de ‘dinámico, seguro, activo’.
Finalmente están los calcos de estructura, que son construcciones en español que han copiado alguna estructura inglesa. Por ejemplo: “tomar acción” (“take action”), “al final del día” (“at the end of the day”), “libre de grasa” (“fat free”), “vender o comprar una idea” (“to sell or buy an idea”), “fuera de servicio” (“out of service”). Estos calcos son particularmente interesantes, porque las palabras patrimoniales que los componen muchas veces disfrazan su verdadera estructura original anglicada.
Como ven, los anglicismos en Puerto Rico ofrecen mucha tela que cortar. Por ello, además de una macroestructura y microestructura muy comprehensivas en cuanto a recogida y análisis de anglicismos, este nuevo diccionario tiene un espíritu funcional: quiere ayudar al usuario a resolver problemas del discurso oral y escrito. Además de la definición del anglicismo, añadirá información sobre su uso y presentará ejemplos reales. El léxico incluido será general, o sea, el del hablante promedio, pero incluirá términos especiales de la medicina, de informática, de música moderna, en la medida en que sean generales ya.
Este diccionario será una contribución importante tanto para Puerto Rico como para el mundo hispanohablante, pues, como dicen las autoras, nuestro país es una de las primera comunidades en recibir anglicismos que luego pasan a circular en el mundo hispánico. Por todo lo anterior, Bienvenido y Welcome!